domingo, 27 de abril de 2014

Bizcocho de Pupuditia SIN GLUTEN, SIN LACTOSA

Hola amigos!! Este domingo voy a compartir con vosotros una receta muy especial.
Es un bizcocho tanto para celiacos como para intolerantes a la lactosa y su origen está en un reino muy muy lejano llamado Pupuditia. No quiero decepcionaros, pero pocas personas lo han visitado. Solo puedo deciros que allí viven unos seres muy adorables que se alimentan de arroz y zumo de manzana, por lo que no saben qué es el trigo. En mi último viaje me interesé por su receta, pues sería válida para todos los celiacos, así que aquí os la dejo para que podáis disfrutarlo en vuestras casas.

Para hacer esta receta y que salga perfecta,  necesitamos hacerla de buen humor y con mucho mucho amor, así que os recomiendo que dejéis que Jonsi os acompañe: https://www.youtube.com/watch?v=okEr34Pju48

Es una receta muy sencilla y da buenos resultados, así que... ¿a qué esperamos?

Esto es lo que vamos a necesitar:


  • 1 medida de yogur de leche de arroz, almendra, sin lactosa...
  • 3/4 medida de yogur de aceite de oliva
  • 2 medidas de yogur de azúcar moreno
  • 3 medidas de yogur de harina de arroz (puede hacerse con harina de trigo igualmente, pero seguramente necesitaremos agregar un poco más de leche si la masa es muy espesa)
  • 1 sobre de levadura
  • 3 huevos
  • 1 pizca de sal
  • 100 g de chocolate negro
Antes de empezar he de decir que puede añadirse a esta masa cualquier otro ingrediente (zumo de limón, frutos secos, esencia de vainilla...) pero para que sea un verdadero bizcocho de pupuditia, tendrá que llevar chocolate troceado :)

En primer lugar, mezclamos el azúcar, la leche, las yemas de los huevos y el aceite.


Por otro lado, mezclamos la harina con la levadura y lo añadimos a la mezcla.


Después, ponemos las claras a punto de nieve y las añadimos a la mezcla.


Ponemos el horno a precalentar a 180º y mientras tanto, partimos el chocolate en cachitos pequeños.


Una vez triturado el chocolate lo añadimos a la mezcla y, tras engrasar el molde con margarina de maíz o soja, la vertemos dentro y lo metemos dentro del horno.


Horneamos durante unos 45 min aprox. De vez en cuando vigilad la superficie y si empieza a tostarse antes de tiempo, podéis cubrirla con un papel de aluminio para que no se queme mientras el resto del bizcocho termina de hacerse.
Cuando pinchemos el bizcocho con un cuchillo y éste salga limpio, podemos sacarlo del horno y dejarlo enfriar.



Espero que lo disfrutéis!! Os aseguro que ha habido duelos por el último trozo (y siempre ganan los Lord, así que... más os vale ser rápidos!)


domingo, 20 de abril de 2014

La cheesecake preferida de los Weasley

Otra vez domingo. Y es que así de rápido pasan las semanas. Pero... más rápido se acaba cualquier delicioso manjar que se cocina en Semana Santa. Así que, para aquellos que aún tengan ganas de dulce (a pesar de todas esas torrijas que vuestras abuelas os han metido a presión en tuppers), hoy os traigo una Cheescake (o tarta de queso) absolutamente deliciosa.

Esta receta tiene un poco de allí y de allá, pues hay mil maneras de preparar una tarta de queso; así que aquí os dejo mi receta final tras haber probado diferentes variedades.

He de decir que no la he hecho para celiacos, pero dado que solo lleva la base de galleta, creo que es fácilmente adaptable sustituyendo las galletas digestive de trigo por galletas sin gluten fáciles de encontrar en grandes supermercados o herbolarios.

Así que todos a cocinar!!

Como es una receta que lleva su tiempo os recomiendo un poco de Assaf Avidan, cuya voz es espectacular y su música muy relajadita.

Esto es lo que vamos a necesitar (para un molde de 26 cm aprox.):



Para la base:
  • 240 g de galletas (con digestive si podéis comer trigo queda mucho mejor la base que con maría)
  • 120 g de mantequilla derretida
  • 110 g de azúcar
  • Una pizca de sal
Para la masa:
  • 1130 g de queso fresco (Philadelphia)
  • 20 g de harina (de arroz para celiacos)
  • 395 g de azúcar
  • Una cucharita de rayadura de limón
  • Una cucharita de rayadura de naranja
  • 5 huevos y 2 yemas
  • Una cucharita de extracto de vainilla o de azúcar avainillada
  • Medio bote de mermelada de frambuesa aprox.

Antes de empezar con la mezcla, engrasamos nuestro molde con mantequilla (recordad que debe ser un molde con base desmontable).


Para hacer la base, trituramos bien las galletas y les añadimos la mantequilla, la pizca de sal y los 110 gramos de azúcar.



Una vez tenemos la mezcla hecha, la distribuimos por todo el molde, incluidos los laterales.
Tened cuidado con que no se os quede mucha cantidad de masa en los bordes inferiores del molde.


Una vez terminada la base, la metemos en el congelador mientras preparamos la masa.

Para empezar con la masa aseguraos de usar un bol bastante grande donde nos quepan todos los ingredientes.

En primer lugar mezclamos el queso, la harina, el azúcar, la vainilla y las dos ralladuras.



Una vez tenemos bien mezclados todos los ingredientes, añadimos los cinco huevos y las dos yemas y batimos hasta obtener una masa homogénea.


¿Ya está todo bien mezclado?
Pues es hora de poner a precalentar el horno a 180º.

Sacamos el molde del congelador, vertemos la masa en él y lo metemos al horno durante una hora aproximadamente.


Es imprescindible estar pendiente del horneado, ya que variarán los tiempos dependiendo del horno.
Para saber cuando sacar la tarta del horno agarra con un trapo el borde del molde y agítala suavemente. Si la masa sigue líquida aún no está lista, si esta fija (aunque se mueva un poquito por el centro) podemos sacarla.
Si veis que se empieza a dorar por arriba y no está lista, cubridla con un papel de aluminio para que no se queme por arriba mientras termina de cuajarse. 
Una vez esté lista la sacamos y la dejamos enfriar.

Una vez fría, debemos dejarla reposar en la nevera durante (sin desmoldar), al menos, seis horas.

Transcurrido este tiempo, mezclamos la mermelada con un poco de agua caliente para aligerar la textura, cubrimos la tarta con ella y la volvemos a meter en el frigorífico.


Y ya podemos disfrutar de nuestra tarta!!



martes, 15 de abril de 2014

Galletas bicolor de origen élfico SIN GLUTEN

Buenas, buenas buenas... Se que hoy no es domingo, pero esto de las nuevas tecnologías a veces me hace olvidar lo importantes que son las contraseñas y... bueno, mejor lo dejamos ahí.

A pesar de la espera he de deciros que estas galletas cuyo origen puede atribuirse a los antepasados de los elfos domésticos (que evidentemente no siempre fueron domésticos) estás deliciosas y son perfectas para cualquier día de la semana. Además quedan perfectas con harina de arroz, por lo que son absolutamente aptas para celiacos!!

Pero antes de ponernos manos a la obra, habrá que buscar una musiquita de acompañamiento. Hoy me apetece algo de Asaf Avidam, tranquilito y bonito bonito. 

¿Ya estamos listos? Pues estos son los ingredientes básicos que vamos a necesitar:


  • 150 g de mantequilla
  • 75 g de azúcar glas
  • 1 pizca de sal
  • 1 cucharita de azucar avainillado
  • 200 g de harina (de trigo o de arroz)
  • 30 g de cacao en polvo
  • 1 yema de huevo (prescindible)

En primer lugar mezclamos la mantequilla (previamente reblandecida) con el azúcar, la sal y la vainilla hasta obtener una masa cremosa.



Tamizamos encima la harina y mezclamos con las manos hasta obtener una masa elástica.


Partimos la masa en dos y tamizamos el cacao en una de las mitades y la amasamos muy bien (a mi se me ha quedado un poco seca la masa con cacao, así que si os pasa eso podéis echarle un poquito más de mantequilla reblandecida)


Una vez mezclado el cacao, formamos una bola con cada mitad, las envolvemos en film transparente y las dejamos reposar durante dos horas a temperatura ambiente.


Durante estas dos fantásticas horas podéis recoger tranquilamente y... ¿qué tal una de Wes Anderson? Os propongo Moonrise Kingdom; tierna, bonita y con una duración perfecta para volver más tarde con nuestras galletas.

Transcurridas las dos horas, extendemos cada una de las bolas en un rectángulo de unos 5mm de grosor. (Cuanto más ancho sea el rectángulo, más grandes saldrán las galletas)
Sobre un rectángulo de masa clara extendemos uno oscuro y los enrollamos por el lado largo hasta formar una especie de tubo.



Antes de continuar, ponemos el horno a precalentar a 180 ºC.

Llega el momento de cortar los rollos en rodajas de unos 5 mm de grosor. Según los vamos cortando los vamos colocando sobre papel vegetal en la bandeja del horno.



Una vez hemos colocado todas las galletas sobre la bandeja, batimos la yema de huevo con una cucharada de nata y pintamos las galletas. (Este últimos paso es opcional, si lo haces te quedarán más brillantes y servirá para que no se desmigajen, pero si no lo haces estarán igualmente deliciosas)


Finalmente metemos la bandeja en el horno a media altura y horneamos las galletas unos 12 minutos.


Transcurrido el tiempo, solo tenemos que sacarlas y dejarlas enfriar sobre una rejilla.


Os recomiendo que invitéis a alguien a merendar porque una vez que pruebas una no puedes parar de comerlas!! Así que no te conviene estar solo ese día ;)


Bon appetit! <3

domingo, 6 de abril de 2014

Bizcocho de chocolate relleno CON o SIN GLUTEN/ SIN LACTOSA

Feliz domingo reposteros! Si hoy habéis decidido poneros a cocinar, habéis elegido un muy buen día!
Y es que hoy os traigo un delicioso bizcocho de chocolate relleno de una fina capa de mermelada. Junto a una taza de té y un buen libro puede ser un delicioso acompañamiento esta tarde.

Pero antes de nada, recordad que sin música no vamos a ninguna parte. ¿Qué tal una de https://www.youtube.com/watch?v=UR-5ekKnX_U?

Esta receta es totalmente apta para celiacos, y la he adaptado para que también puedan disfrutarla los intolerantes a la lactosa sustituyendo la mantequilla por margarina de soja o maíz y utilizando leche de arroz o de almendra.

Vamos a ello!

Estos son los ingredientes que vamos a necesitar:


  • 250 g harina de arroz (también puede hacerse con harina de mijo -también sin gluten-, o de trigo si no eres celiaco y no tienes a mano harina de arroz)
  • 1 sobre de levadura
  • 150 g de chocolate de repostería
  • 3 huevos
  • 110 g de azúcar moreno
  • 110 ml de aceite vegetal
  • 1 cucharita de azúcar avainillado
  • 6 cucharadas aprox. de mermelada (a elegir)
  • Azúcar glass (para espolvorear)
  • Mantequilla/ margarina (para engrasar)
  • Medio vaso de leche/ leche de arroz, avena (no celiacos), almendra...
  • 50 g de almendras molidas (opcional)

En primer lugar mezclamos la levadura y la harina en un cuenco.
Después, troceamos el chocolate y lo ponemos a calentar a temperatura media en un cazo con 6 cucharadas de leche hasta que se derrita y lo dejamos enfriar.



Mientras se enfría, podéis aprovechar para ir engrasando el molde y así ahorrar tiempo.

Una vez frío lo mezclamos con la harina.


Poco a poco incorporamos los huevos, las dos clases de azúcar y el aceite hasta obtener una mezcla homogénea. (Si veis que se os espesa mucho, podéis añadir leche poco a poco hasta que tenga una textura más cremosa)





Si lo deseáis podéis añadirle almendras molidas o cualquier otro fruto seco bien molido que le dará más sabor a la masa.

Si aún no has engrasado el molde es el momento de hacerlo. Puedes utilizar cualquier tipo de molde aunque, en este caso, será mucho más fácil cortar y rellenar el bizcocho si usas uno cuadrado o rectangular.
(Por experiencia, es más fácil desmoldar el bizcocho si espolvoreamos un poco de pan rayado sobre la mantequilla, pero es una opción no-celiaca a no ser que sea pan rayado sin gluten)

Precalienta el horno a 180ºC y una vez hayas puesto la masa en el molde, hornéala a media altura unos 35 minutos.


Ten en cuenta que en cada horno los tiempos de cocción son diferentes. Así que no te vayas muy lejos y cuando veas que la parte de arriba está dorada, pínchalo con un cuchillo de mantequilla (hazlo rápido para que el horno no pierda mucho calor). Si el cuchillo sale manchado y la parte de arriba está hecha, déjalo otros minutos solo con el fuego de abajo encendido o cúbrelo con papel albal. 

35 minutos no es mucho tiempo, pero siempre podéis aprovechar para leer un capítulo de un libro chachi o ver un episodio de una sitcom como Modern Family, que os sacará una sonrisa y hará que el tiempo de espera se os pase volando.

Una vez el cuchillo salga limpio, sacamos el bizcocho del horno y lo dejamos enfriar dentro del molde.

Cuando se haya enfriado lo desmoldamos y lo cortamos por la mitad horizontalmente.



Untamos la mitad inferior con la mermelada que hayamos elegido. Yo en esta ocasión he decidido untar una mitad de frambuesa y la otra de mango.


Una vez untada la mermelada, colocamos encima la mitad superior del bizcocho y presionamos un poquito.

Finalmente, lo espolvoreamos con azúcar glass y... voilá! Ya tenemos nuestro bizcocho!